lunes, 4 de enero de 2016

Desorden


Aviso, que parece que sí, que vuelvo. No sé, pero me apetece estar aquí, me apeteces. 
Tengo un pijama rosa y muchas ganas de que me lo quites, un par de cervezas en el frigorífico, una con tu nombre y repito, ganas, muchas ganas, de que me lo quites, todo.
Hay de pronto miles de películas que me apetece ver no sé si por ti o contigo, igual las dos cosas. Hay, pero no estás tú.

Qué raro y qué bien. Que viniste desordenaste y te fuiste, pero me has durado más que la resaca de aquella noche y qué raro y qué bien (no, no sé).

Qué coño desorden, o sí, pero qué bonito, me encanta, soy súper desordenada y tu cuarto parece decir lo mismo de ti. Tu cuarto. El mío parece que hoy quiere hacerte un sitio. Hoy, ayer, quizá mañana. Quizá ya no más.
Tan fácil como que está pasando, tan difícil como que no pasa, no pasa nada.Y por eso, otra vez que raro y que bien (o no, no me convence).
Te creo, no te creo...o qué más da, a mí si que me da, el miedo es libre. Y que pasa si es que sí, con todo lo que conlleva y con todas sus consecuencias, y que pasa si no, total, se queda en nada (que ya lo somos).
Decidme, a qué sabe un beso, a qué sabe el beso, ese que rompe, que desordena, que parte el esquema, que engancha, que busca, que crea deseo, ganas y desenfreno. ¿A qué sabe? Qué sabréis vosotros a qué sabe,

Que parece que sí, que vuelvo, pero también parece que ya no es triste que ya no duele.
Lentejuelas, había lentejuelas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Chat gratis